Servicios Climáticos
En primer lugar, se debe hacer una diferenciación entre las diferentes componentes del manejo de información climática. Según el Marco Mundial para los Servicios Climáticos (GFCS, por sus siglas en inglés), se puede hacer la siguiente división.
Datos climáticos: observaciones climáticas históricas y en tiempo real así como resultados de modelos directos referentes a períodos históricos y futuros. Todos los datos climáticos deberán ir acompañados de información sobre la manera en que se obtuvieron estas observaciones, es decir, deben tener metadatos.
Producto climático: síntesis derivada de los datos climáticos. Un producto combina datos con el conocimiento climático, para de alguna forma, añadirle valor. Se puede considerar por ejemplo un mapa o gráfico como un producto climático.
Información climática: es el resultado de los datos climáticos, transformado en un producto sumado a los conocimientos de un técnico o experto. Un ejemplo puede ser un boletín climático, que contiene, además de gráficos y mapas, el análisis de las condiciones y perspectivas.
Servicio climático: por último, el servicio climático puede ser definido como la información climática adaptada de tal manera que ayude a personas y organizaciones en la toma de decisiones. Esta componente requiere un nivel de participación suficiente, así como mecanismos de acceso eficaz que responda a las necesidades de los usuarios.
Algunos de los ejemplos de servicios climáticos definidos por el GFCS pueden ser vistos en la imagen abajo. Los principales son la agricultura y seguridad alimentaria, reducción de riesgo de desastres, energía, salud y recursos hídricos.
Ejemplos de tipos de servicios climáticos. Créditos: GFCS.